Esperaba a alguien que nunca llegó

Allí estaba en una esquina del barrio gotico de Barcelona, la apodé Margarita, sentada paciente esperaba a que viniera vaya a saber quien, entre tanto miraba la hora e intuia con la cabeza la dirección en que vendría, pero por cuestiones de la providencia o el universo  este/a nunca llegó.